martes, 29 de enero de 2008

Se hace el camino al andar

Quedó claro el otro día que algo dentro de mi queria irse lejos, más allá, mucho más... hasta poder tocar el horizonte.

No conseguí alcanzarlo. Como en un espejo, las montañas que mañana tras mañana me acompañan desde la ventana del despacho, pasaron a estar bajo mis pies... Y las torres y el humo de Madrid tan tan lejos que pude olvidarme de ellos unas horas.
Y como siempre que cambias de punto de vista, hay mil historias por contar.


Photobucket

Cuesta arriba hasta el comienzo, sientate en el sillón de piedra del rey olvidado; y sigue y sigue subiendo (¡cómo cuesta!), no pierdas el camino de marcas rojas en granito...
Y entre las cabezas, parate a mirar como el verde y el azul se mezclan a lo lejos. Ya que has llegado hasta aquí, no te vas a rendir... sube aún más arriba, que te toman la delantera los enanos ¡¡que no se diga!! ¡¡A por ellos compañero!!
En el pico del fraile, parada y fonda, y reinventa el camino. A la derecha la senda, a la izquierda la meta... ¿Campo a través? Cuidado, que las apariencias engañan ¡Ojo con las zarzas asesinas! ¡Y con la pendiente! ¡Y con las piedras sueltas! Me da que escogiste mal... esto no tiene salida.... marcha atrás hasta que encuentres un paso... ¡¡Ya está!! ¡¡Por allí tienes un hueco!!
Ahora, baja y baja y baja. ¡Civilización al fin!. Respira. Ya casi has llegado, 5 kilometros de camino forestal hasta el monasterio, y todo arreglado. Un poco más... aguanta... el embalse... la carretera... farolas y casas... ¡Por fin! ¡Lo conseguiste!


Pero ¿de que sirve contarlas?

Caminante, no hay camino...





.

7 comentarios:

David Martín dijo...

Y al final ese camino es lo que más merece la pena muchas veces, más que llegar... Pero filosofías aparte, viene bien de vez en cuando evadirse un poco y lanzarse a estas aventurillas, y seguir peleando para llegar arriba, pateándoles el culo a esos malditos enanos que están por todas partes. XD.

Por cierto, sobre las zarzas, si te metiste entre ellas estarás llena de arañazos XD. Y es que como dicen en mi pueblo: "No hay bicho más dañino que la zarza" (con acento el dicho gana mucho, pero bueno). XD.

María dijo...

Jajjaja. Me gusta.

Cuanta razon tienen los de tu pueblo.

Yo iba bajando por alli pensando "pues si, pues si, como me caiga va a ser un alfiletero rodante lo que llegue al Escorial... con un poco de suerte atino en el embalse ese y todo..."

Pero Bicho Malo Nunca Muere ;-), llegue sana y salva.

Tana dijo...

...se hace el camino al andar...

Siempre viene bien evadirse un poco del día a día, aunque eso signifique patearse todo ese camino para alcanzar la cima ;)
Aiii a mi de pequeña, en el cole, me llevaron allí, las vistas son increíbles!

Un beso!

Anónimo dijo...

Sirve para que gente como yo descubra que hay rutas muy chulas y que quiero hacer ^^

Y contar tu historia -o, en este caso, escribirla- también sirve para que no te olvides de ella ^.^

Un besazo!

Sarg Bjornson dijo...

Zarzas? Claro, como yo a la montaña siempre voy en vaqueros... XDDD

María dijo...

Tana Sip, las vistas son mu bonitas - y nos hizo un dia increible. Estoy deseando que llegue la proxima excursion, en Febrero si todo va bien ^^.

Saphy Rutas x la sierra las hay muy chulas, incluso mejores que esta :-). Habria ganado el paisaje en primavera, mas verdecito. Pero te las recomiendo (aunque tu que te puedes ir al mar! Seguro q hay rutas preciosas por alli tambien!)

Sarg Tendria q haber colgado una foto de las Zarzas Sobrealimentadas. Con o sin vaqueros, si pasan del cuello, mala cosa ;-). Tuvimos que rodearlas (ideas kamikazes de gritar "Banzai!!!!!!" y lanzarse con los ojos cerrados hubo, claro. A mi, no me convencieron mucho...)

Sarg Bjornson dijo...

Ahhh, quieres decir zarzas! jajaja